jueves, 15 de mayo de 2014

Dalbergia retusa


El cocobolo es un árbol absolutamente nativo de la Región Mesoamericana, desde México hasta Panamá.
 
En Costa Rica propiamente, el cocobolo crece naturalmente en todas las regiones en donde impera un clima con una estación seca muy marcada, propiamente en la provincia de Guanacaste y en el extremo norte de la provincia de Puntarenas.
 
En algunas regiones de la provincia de Guanacaste en donde se han abandonado extensas áreas antes dedicadas al pastoreo del ganado, se han formado naturalmente y en muy pocos años, densas poblaciones de cocobolo, a partir de los frutos y semillas que llegan flotando con el viento desde árboles adultos cercanos. Más adelante veremos que el cocobolo posee una extraordinaria capacidad de auto propagarse y formar poblaciones en forma natural.
 
La especie es muy notable pues posee una extraordinaria capacidad de sobrevivencia y de resistencia a las adversidades ambientales. Por ejemplo, a ambos lados de la Carretera Interamericana, desde el puente sobre el río Barranca hasta la frontera con Nicaragua, podemos encontrar miles y miles de árboles de cocobolo pequeños, los cuales todos los años al inicio del verano son cortados y/o quemados por los finqueros al limpiar las orillas de sus propiedades, y todos los años sin falta vuelven a rebrotar al caer las primeras lluvias del invierno, en una eterna lucha por sobrevivir que se inició sólo Dios sabe hace cuántos años ya.   
  

tomado de: http://www.elmundoforestal.com/